Hoy en día está de moda estar contra la Iglesia, por lo que sea, pero está de moda. No hay lugar para el que opine distinto...
Yo soy católico, creo en Dios, no voy a misa, no comulgo... discrepo en muchas cosas con la Iglesia, pero escucho, analizo y pretendo entender algunas actitudes a partir de analizar la posición que la misma Iglesia tiene.
Leyendo el blog de Taly, encontré este excelente post; Taly analiza párrafo por párrafo la carta que envió el Episcopado al Gobierno por todo este tema de la campaña de prevención de enfermedades de transmisión sexual, y lo hace de una manera sobresaliente. Esto es criticar de verdad.
Seguro que la Iglesia se equivoca en muchas cosas, seguro. Creo que es un error que se oponga a la utilizacón de métodos anticonceptivos o al uso del preservativo. Pero entiendo que el hecho de que propongan la abstinencia o la fidelidad como solución a la propagación de enfermedades de transmisoión sexual, tiene que ver con la docrina misma. Para la Iglesia, la capacidad de reproducción que tiene el ser humano es un don, y como tal, lo debe cuidar y respetar. Entendiendo esto, puedo entender que propongan la abstinencia o la fidelidad como soluciones. Aunque no las comparta.
Ojo, cuando se habla de que la Iglesia se debe modernizar, no hablamos de cambiar radicalmente el rumbo de la doctrina. Hablamos de que se deben reanalizar las posiciones que se tienen en temas como el uso del preservativo, la comunión de personas divorciadas, el ordenamiento secerdotal de las mujeres.
Criticar es el punto de vista más sencillo en el que podemos ubicarnos, más, si no entendemos; por eso me gustó mucho la crítica de Taly, porque es la primera vez que leo algo fundamentado de verdad...